Taylor Swift y su aporte millonario a la NFL

LAS VEGAS, Nevada.- La aparición de Taylor Swift en la temporada de la NFL ha tenido un impacto significativo en el ámbito económico tanto para la liga estadounidense como para el equipo de los Chiefs.
Según la consultora Apex Marketing Group, la famosa estrella pop se ha convertido en un activo sumamente importante para la NFL, generando un valor de marca de 331.5 millones de dólares para Kansas City y la liga en general desde que hizo público su romance con Travis Kelce, jugador de los Chiefs.
La consultora de publicidad y marca en Estados Unidos destaca el impacto económico que Swift ha generado para una de las ligas deportivas más importantes del mundo.
El romance entre Taylor y Travis ha provocado que los seguidores de la cantante, conocidos como 'swifties', acudan masivamente a los estadios donde juegan los Chiefs, incluso como visitantes, para ver a su ídolo y comenzar a convertirse en fanáticos del fútbol americano.
Además, los ratings televisivos se han incrementado considerablemente, al igual que las ventas de las camisetas de Kelce y otros jugadores, reportando aumentos de hasta un 400%.
Estos factores impulsan aún más a la NFL y contribuyen a su crecimiento económico. La televisión incluso ha instalado cámaras exclusivas para capturar todas las acciones de Swift en los palcos.
Cada aparición de Swift en un estadio para apoyar a su novio ha despertado un interés descomunal, tanto que la NFL ha notado claramente el impacto de tener a la pareja de moda en Estados Unidos.
El enfrentamiento entre los Buffalo Bills y los Kansas City Chiefs se convirtió en el partido de la ronda divisional más visto de la historia, atrayendo a una audiencia masiva.
Curiosamente, una de las búsquedas más recientes en internet relacionadas con la NFL se refiere al tiempo que tarda una persona en volar desde Tokio hasta Las Vegas.
Esto se debe a que Swift tiene programados cuatro conciertos consecutivos en la capital japonesa del 7 al 10 de febrero.
Para poder asistir al Super Bowl, la cantante tendrá que salir de Tokio inmediatamente después de su último concierto, pero a su favor, al volar de Japón a Estados Unidos. A las 23:00 horas de Tokio del 10 de febrero, serán las 6:00 de la mañana en Las Vegas, lo cual le dará suficiente margen para cruzar el Pacífico y llegar a tiempo al partido del domingo 11 por la tarde, para estar presente en el Super Bowl LVIII.
