Arlington, Texas.- Horas antes del enfrentamiento entre los Dallas Cowboys y los Houston Texans, un curioso incidente sacudió el AT&T Stadium. Un pedazo del techo se desprendió mientras se abría la parte retráctil del mismo, causando alarma entre los presentes. Afortunadamente, el estadio estaba casi vacío en ese momento y no se reportaron heridos, aunque el incidente dejó en evidencia los riesgos que conlleva la estructura del coloso de Arlington.
¿Cómo ocurrió el incidente?
El incidente ocurrió durante un día en el que los vientos alcanzaron hasta 30 mph, lo que contribuyó al desprendimiento de los escombros. Aunque la estructura del estadio está diseñada para resistir condiciones extremas, los funcionarios del equipo están revisando las causas del incidente para asegurarse de que la parte retráctil pueda abrirse de manera segura en el futuro. El techo no se había abierto para un juego de los Cowboys desde la temporada 2022, lo que hace aún más singular este hecho.
El AT&T Stadium, inaugurado en 2009, es conocido por sus arcos que sostienen el techo a casi 300 pies sobre el campo, y tiene una capacidad para 80,000 espectadores. Este tipo de estructura, aunque impresionante, ha sido objeto de debate en el pasado debido a su diseño y vulnerabilidad ante condiciones climáticas adversas.
For the first time in two years, the Dallas Cowboys opened the roof at AT&T Stadium ahead of Monday Night Football.
— Front Office Sports (@FOS) November 18, 2024
A large piece of metal then fell onto the field, and the roof was closed again.
(via @noah_bullard)
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Curiosamente, el incidente ocurre poco más de una semana después de que el receptor de Dallas, CeeDee Lamb, mencionara que el sol le lastimó los ojos durante la derrota 34-6 contra los Philadelphia Eagles. En ese juego, Lamb no pudo reaccionar a un pase en la zona de anotación debido a los intensos rayos del sol, que penetran a través de las grandes ventanas de vidrio en el lado oeste del estadio, orientado de este a oeste.
Aunque el estadio utiliza cortinas en la zona oeste cuando el sol se convierte en un problema, el propietario de los Cowboys, Jerry Jones, ha rechazado el uso de estas cortinas, argumentando que ambos equipos juegan bajo las mismas condiciones. Sin embargo, este incidente subraya los problemas recurrentes que el AT&T Stadium enfrenta con su peculiar orientación.