Guadalajara, Jalisco.- El fútbol, considerado por muchos como un deporte apasionante que une a personas de diferentes ámbitos bajo un mismo sentimiento, lamentablemente, en ocasiones se ve empañado por actos de violencia que emanan de la frustración y la pasión desmedida. El Estadio Jalisco fue testigo de uno de esos tristes episodios tras la derrota del Atlas 1-2 ante Monterrey, cuando los aficionados se vieron envueltos en una pelea tumultuaria tanto dentro como fuera del recinto.
Después del emocionante encuentro entre el Atlas y Monterrey, la atmósfera en el Estadio Jalisco se volvió tensa, y lo que debería haber sido una celebración deportiva se convirtió en un escenario caótico.
🚨 ¡DISTURBIOS EN GUADALAJARA!
— POSTA Deportes (@POSTADeportes) March 18, 2024
Después del Atlas-Rayados, se registraron algunos disturbios en las afueras del Estadio Jalisco ⚠️ pic.twitter.com/hoP4Y4Jcre
Los informes sugieren que los ánimos estaban exaltados incluso durante el partido, con intercambios de insultos y gestos provocativos entre los aficionados de ambos equipos. Sin embargo, fue después del pitido final cuando la situación escaló rápidamente. La frustración por la derrota del Atlas se transformó en violencia, y los seguidores comenzaron a enfrentarse entre sí.
La policía retiro a algunos rijosos dentro del estadio, pero la bronca se extendió fuera del estadio. Los intentos de contener la situación por parte del personal de seguridad resultaron insuficientes ante la magnitud de los disturbios.